El sistema de alerta de artículos de la Concejalía de Consumo advierte de los riesgos que presentan dos juguetes para niños y una barba para disfraces

El Ayuntamiento traslada, además, una serie de recomendaciones a seguir para la adquisición de disfraces y complementos para la celebración de Halloween.

13 de octubre de 2017. La Concejal de Consumo en el Ayuntamiento de Lorca, María del Carmen Ruiz, ha informado que el servicio digital de alertas puesto en marcha por parte de esta área de gestión ha reportado en los últimos días 3 avisos relacionados con otros tantos productos cuya utilización puede constituir un riesgo para los usuarios. Todos los lorquinos interesados en conocer esta información pueden obtenerla accediendo a http://www.sanidadyconsumo.lorca.es/alertas.asp

La Edil de Comercio ha explicado que, en el primero de los casos, se trata de un juguete de playa con diferentes accesorios como pala, rastrillo y cubo en diferentes colores, que ha sido elaborado por la marca Toinsa (modelo ítem número c29). Este artículo constituye un riesgo para la seguridad de la población infantil, ya que al realizar el pertinente ensayo de impacto se desprenden parcialmente varias de las piezas del juguete, que tras realizar la necesaria prueba de tracción sobre el trozo desprendido parcialmente, se separa completamente, reduciéndose a trozos pequeños, otras piezas generan a su vez fragmentos pequeños tras el ensayo de tracción. El cierre del envase del producto, además, es una pieza pequeña, por lo que no son conformes con la normativa aplicada y significa un riesgo para la seguridad de la población infantil por posibilidad real de asfixia.

Ruiz Jódar ha trasladado que la segunda de las alertas se refiere a un juguete expansible, en concreto un huevo de dinosaurio de la marca Ousdy. Para facilitar su reconocimiento por parte de los ciudadanos debemos indicar que se trata de un artículo cuya descripción responde a un huevo de material degradable que contienen en su interior un juguete representando a un dinosaurio que, al contacto con el agua, incrementa notablemente su tamaño. Este elemento supone un riesgo para la salud de la población infantil ya que se ha demostrado que puede causar asfixia por la obstrucción de las vías respiratorias internas. De hecho, de acuerdo con los datos trasladados a esta concejalía por parte de la red de alertas a nivel nacional, la muestra cabe completamente en el cilindro de partes pequeñas antes de realizarle el ensayo de materiales expandibles. Por ello no debería experimentar con este ensayo un aumento en sus dimensiones superior al 50%. Incumple este apartado al expandirse tras 24 horas un 54% y 69%. También presenta incumplimientos de etiquetado al no presentar el preceptivo marcado como producto permitido en la Unión Europea.

La Concejal de Consumo ha explicado que el tercero de los artículos es una barba canosa, marca Guirca (referencia 11511), que se suele utilizar como complemento de disfraz. Se trata de un artículo que ofrece dos barbas canosas en un envase de cartón en el que figura la referencia, el código de barras, la marca y la advertencia de que no es un juguete y no recomendado a menores de 14 años. La alerta levantada se deriva del hecho de que este elemento puede suponer un riesgo para la seguridad de los consumidores por su carácter inflamable. Cabe indicar que durante las pruebas realizadas para evaluar la seguridad del artículo se detectó que la duración de la persistencia de la llama es superior a 2 segundos después de la eliminación de la llama de ensayo, siendo la mayor longitud quemada superior al 75 % de la mayor longitud inicial.

Hemos de recordar que estas alertas se levantan en virtud del sistema estatal de intercambio rápido de información, integrado en el sistema europeo de alerta (RAPEX), con la finalidad de facilitar una comunicación e intercambio rápido de información de aquellas actuaciones que se adoptan en caso de riesgo grave. El responsable de la coordinación de esta Red es la Agencia Española de Consumo, Seguridad Alimentaria y Nutrición (AECOSAN), en la que se integra el Instituto Nacional de Consumo.

La Edil de Consumo ha explicado que la página web municipal http://www.sanidadyconsumo.lorca.es/alertas.asp ofrece el listado completo y actualizado de los productos objeto de alerta Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Agencia Española de Consumo Seguridad Alimentaria y Nutrición. La red de alertas española cuenta con la participación de diferentes órganos asesores en materia de seguridad de productos, como es el caso del Comité Europeo de la Directiva de Seguridad General de Productos, el Grupo de Expertos en Seguridad de Juguetes y Grupo de Cooperación Administrativa de la Directiva del Parlamento Europeo y del Consejo, el Comité español de valoración (formado por tres miembros designados por AECOSAN y representantes de las Comunidades Autónomas), y la Comisión Técnica para la Seguridad de Productos.

La Concejal de Consumo ha anticipado, además, una serie de recomendaciones cara a la celebración de Halloween, que se ha popularizado de forma notable en nuestro municipio durante los últimos años. En este sentido, y siguiendo los consejos de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), se sugiere prestar cuidado con la aplicación de maquillajes para la caracterización de los personajes de los que se suelen disfrazar (fantasmas, esqueletos, vampiros…) puesto que algunos productos de maquillaje contienen sustancias químicas que no son inocuas y que, en ocasiones, pueden provocar reacciones alérgicas o de sensibilidad sobre todo en la piel de niños pequeños. Hemos de tener en cuenta la cantidad de maquillaje que se aplica, la necesidad de retirarlo por completo, eliminarlo rápidamente en caso de reacción, evitar el uso de espráis sobre el pelo (recurrir a pelucas o gorros).

Ruiz Jódar ha reseñado que uno de los elementos más de moda para disfrazarse en estas fechas son las lentillas cosméticas, un artículo con el que se debe tener un especial cuidado para evitar problemas. La Edil de Consumo se ha referido también a la necesidad de comprobar la composición de algunos disfraces. Si compramos un disfraz deberíamos lavarlo antes de usarlo o al menos dejarlo abierto, aireándose, durante 48 horas, para limitar la presencia de sustancias potencialmente peligrosas. En cualquier caso, un disfraz seguro debe:
Estar elaborado en material que no sea inflamable.
Para los niños más pequeños, de menos de 3 años, es importante asegurarse de que no hay partes pequeñas, o elementos del disfraz que pueda llegar a tragar o introducir en la nariz.
Si tiene capucha, careta o máscara, asegúrate de que no limita la visión.
Si el vestido es largo, no debe superar los tobillos del niño, para que no se lo pise y tropiece.
Los accesorios deben ser de goma, nunca metálicos.