El Alcalde, Fulgencio Gil, anuncia la suscripción de un nuevo convenio de colaboración con la Asociación de Ayuda al Enfermo Renal que beneficiará a 200 personas

El Primer Edil visita la Unidad de Diálisis de La Viña para conocer el gran trabajo que realizan los profesionales médicos y el tratamiento que reciben los pacientes. Se trata de unas instalaciones que están mejorándose gracias a una inversión de 600.000 euros.

2 de noviembre de 2017. El Alcalde de Lorca, Fulgencio Gil, junto al Director General de Asistencia Sanitaria, Roque Martínez, la Presidenta de ADAER, Dolores Guzmán, y la Concejal de Sanidad, María del Carmen Ruiz, han visitado esta mañana las instalaciones de la Unidad de Diálisis, dependiente de la Consejería de Sanidad de la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia, ubicadas en el barrio de La Viña, con el fin de conocer de primera mano el gran trabajo que realizan los profesionales médicos de este centro, así como la Asociación de Ayuda al Enfermo Renal (ADAER).

Fulgencio Gil ha explicado que “dentro del compromiso que mantiene el Ayuntamiento de Lorca con las asociaciones de enfermos de distintas patologías, vamos a suscribir en los próximos meses un convenio con ADAER para que esta organización pueda llevar a cabo los distintos proyectos que realizan con el fin de que toda persona diagnosticada de una enfermedad renal pueda recibir una atención integral para cubrir las necesidades que esta enfermedad le genere”.

El Alcalde de Lorca ha indicado que “el objetivo que se pretende conseguir es desarrollar un proyecto de Atención Integral a efectos de provocar cambios y mejoras en las condiciones de vida del enfermo renal y de su vida familiar. De este modo, el programa se desarrolla en la Sala de Diálisis del Hospital Rafael Méndez y en la Unidad de Diálisis ubicada en La Viña, en la cual se atienden en tres sesiones diarias a casi 90 pacientes de toda la Comarca del Valle del Guadalentín. Cabe destacar que la mayoría de estas personas necesitan dializarse 3 veces a la semana, y el tratamiento dura alrededor de 4 horas. En total, el programa va dirigido a 200 pacientes y sus correspondientes familias. Por ser un número muy elevado de beneficiarios, y por tratarse de personas, en su mayoría, de edad avanzada, desde ADAER se ofrece una atención tanto nutricional como psico-social dirigida a enfermos y a familiares”.

Gil ha señalado que “además, esta Asociación también realiza distintas acciones con los pacientes, tales como tratamientos individualizados o visitas periódicas del psicólogo, trabajador social y nutricionista, tanto al Hospital Rafael Méndez como a la Unidad de Diálisis de La Viña, en incluso al propio domicilio. En ellas atienden a los enfermos que inician el tratamiento de diálisis para proporcionarles información acerca de los autocuidados que deben llevar en relación con el tratamiento, incluyendo indicaciones sobre los alimentos que deben evitar y los que les convienen, así como la forma de elaboración más adecuada. También le ofrecen la posibilidad de mantener contacto con otras personas que estuvieron en su misma situación para derribar falsas creencias y estereotipos”.

El Primer Edil ha añadido que “otro de los proyectos de ADAER es crear un grupo de ayuda mutua, ya que la pertenencia a la estructura grupal brinda al paciente la posibilidad de desarrollar sus capacidades, aumentar sus saberes y conseguir llegar a la superación de problemas de forma mucho mejor y más completa de lo que podría por sí solo. Y, en el caso de enfermos renales, posibilita el apoyo social y compartir y expresar sus sentimientos, lo cual ayuda a amortiguar el estrés y proporciona una estructura para la maduración frente a la enfermedad”.

Fulgencio Gil, por último, ha querido agradecer “a la Comunidad Autónoma como a ADAER la implicación que muestran y la buena labor que realizan en el cuidado de los enfermos renales de todo el Área III de Salud. Gracias a los grandes profesionales médicos que trabajan en la Unidad de Diálisis, como a los componentes de la Asociación de Ayuda al Enfermo Renal, los pacientes que sufren Insuficiencia Renal Crónica se encuentran bien atendidos y pueden tener la mejor calidad de vida posible, ya que tanto a ellos como a sus familias se les ofrecen las herramientas necesarias para la adaptación y aceptación de la enfermedad y el tratamiento”.