El Ayuntamiento de Lorca intensifica las labores de vigilancia y control del mosquito tigre con la instalación de nuevas trampas en Zarcilla de Ramos, La Paca, La Parroquia y La Escucha
Además de los trabajos de fumigación, la Concejalía de Sanidad continúa con las labores de desinfección contra cucarachas y desratización, tanto en el casco urbano como en pedanías, y recuerda que los vecinos pueden dirigirse al teléfono 968466542 para advertir de la presencia de plagas
21 de julio de 2020. El concejal de Sanidad del Ayuntamiento de Lorca, José Ángel Ponce, ha dado a conocer, esta mañana, los detalles de la campaña de vigilancia y control, que cada año se lleva a cabo desde el consistorio lorquino contra el mosquito tigre.
El edil de Sanidad ha concretado que “este año se han colocado 10 trampas más que el año pasado; en total, 26 trampas dobles de ovoposición, o lo que es lo mismo, 52 en distintas localizaciones del municipio como el centro urbano, y en pedanías como La Hoya, Almendricos, Campillo o Ramonete, entre otas. Por primera vez se han instalado trampas en Zarcilla de Ramos, La Paca, La Parroquia y la Escucha”.
El edil de Sanidad ha detallado que “en las pedanías altas de momento no se han encontrado positivos, aunque es probable que el mosquito pueda colonizar estas zonas, ya que de hecho este está ya presente en municipios situados al norte del nuestro como Caravaca, Cehegín o Moratalla. No obstante, si nos comparamos con el resto de la Región, la positividad en nuestro municipio es de las menores, tal y como se puede apreciar en el mapa de municipios del Plan Regional”.
José Ángel Ponce ha explicado que “la trampa que se coloca consiste en un recipiente cilíndrico de plástico de color negro en el que se introduce una tablilla de madera. Los recipientes de plástico se llenan con agua, dejando un par de centímetros de la tablilla sin cubrir, se les añade pienso de conejo para que el agua disponga de nutrientes y así atraiga a la hembra de mosquito a realizar la puesta de huevos sobre la tablilla. En cada punto de muestreo se disponen por tanto 2 trampas con una separación de entre 2 y 20 m. Las trampas se deben poner a la sombra, preferentemente en vegetación y a no más de 1,5 m de altura”.
Ponce Díaz ha concretado que “las primeras trampas se colocaron el pasado 28 de abril y cada 15 días se recogen y se reponen las tablillas y se trasladan las muestras al laboratorio de la Facultad de Biología de la Universidad de Murcia”.
Los resultados de los distintos muestreos, así como los municipios participantes pueden ser consultados en la página web elaborada al efecto por los responsables del Plan regional de vigilancia de mosquito tigre: https://www.um.es/grzba/Vigilancia_Mosquito_Tigre/.
Entre las recomendaciones para el control del mosquito tigre se recomienda eliminar las instalaciones y objetos en los que se pueda acumular agua; tapar con malla mosquitera bidones de riego que acumulan agua, o cambiar el agua de los bebederos de los animales un par de veces por semana; tratar con biocidas autorizados las instalaciones y objetos que no pueden eliminarse, ni desecarse, ni taparse o cambiar el agua con frecuencia como los imbornales de las calles que acumulan agua durante más de una semana.
En el ámbito privado se deben incrementar las medidas de sensibilización ciudadana, por ello desde el Ayuntamiento se han repartido trípticos y carteles de sensibilización ciudadana, además, se ofrecen charlas informativas a comunidades de vecinos u otras entidades asociativas y pide la colaboración ciudadana para detectar posibles focos y eliminar criaderos.
Cabe recordar que el ‘aedes albopictus’, comúnmente conocido como “mosquito tigre” es un vector competente para la transmisión de los virus del chikungunya, del dengue y del Zika. La primera vez que se identificó en Europa fue en 1979 en Albania y, más tarde, en Italia. En España fue detectado por primera vez en Cataluña en 2004 y desde entonces ha colonizado progresivamente la costa mediterránea, alcanzando la Región de Murcia en 2011 y el municipio de Lorca en 2015.