La muestra, en la que se incluye también la proyección de un documental, estará abierta al público del 24 al 30 de abril
A través de “Vidas que se unen” niños del Colegio San Cristóbal y mayores del centro de día de Poncemar han realizado durante tres meses numerosas actividades juntos para combatir la brecha generacional
Los resultados obtenidos muestran mejoras en la autonomía física, cognitiva y motivacional de los participantes, así como la creación de vínculos solidarios entre niños y mayores
En esta experiencia colaboran el Ayuntamiento de Lorca, la Fundación Poncemar, el Colegio San Cristóbal, Convive Fundación Cepaim y la Universidad de Murcia
Rosa Mª Medina, edil de Educación: “El éxito del proyecto ha puesto de manifiesto la necesidad de difundirlo para que se pueda llevar a cabo en otros centros educativos e instituciones de mayores”
24 de abril de 2024. La Fundación Poncemar y la Universidad de Murcia han presentado este miércoles los resultados del proyecto ‘Vidas que se unen’, una iniciativa que promueve la solidaridad intergeneracional y la inclusión social en Lorca, y que se ha desarrollado durante los meses de octubre de 2023 a enero de 2024 con la colaboración del Ayuntamiento y Convive Fundación Cepaim.
Este proyecto radica en la colaboración entre personas mayores del centro de día de Poncemar y niños y niñas del Colegio San Cristóbal, ambos ubicados en el Barrio de San Cristóbal, una zona de amplia diversidad cultural para combatir la brecha generacional. “Esta experiencia pionera ha transformado tanto el centro escolar como el centro de día en espacios abiertos, ya que los mayores han podido estar en constante contacto con su entorno y con las nuevas generaciones, realizando activamente numerosas actividades con el objetivo de eliminar estereotipos por edad o la procedencia étnica, contribuyendo a fortalecer vínculos entre ellos y favoreciendo el fomento de las capacidades funcionales y cognitivas”, ha indicado la edil de Educación.
Rosa María Medina ha manifestado que “a lo largo de 10 sesiones, con encuentros quincenales, los niños se trasladaban la centro de día al que asisten los mayores, - aunque algunas sesiones se han realizado en el colegio o en el entorno del barrio-, para realizar diversas actividades diseñadas para abordar temas de interés y necesidades, incluyendo juegos tradicionales, nuevas tecnologías, tradiciones, convivencia, y conocimiento del medio natural, entre otros”. La colaboración desinteresada de maestros jubilados en algunas de las sesiones también ha enriquecido aún más este proyecto, ya que han podido compartir su experiencia con los participantes.
Los resultados obtenidos muestran el cumplimiento de los objetivos planteados, con mejoras en la autonomía física, cognitiva y motivacional de los participantes, así como la creación de vínculos solidarios, culturales, de respeto y de ayuda entre los niños y los mayores. “Este éxito ha superado las expectativas establecidas dadas la multitud de beneficios generados, destacando la necesidad de difundir esta experiencia para que se pueda llevar a cabo en otros centros educativos e instituciones de mayores, para lo que ya trabajamos desde el Consistorio lorquino”, ha reseñado la concejal.
Medina ha explicado que “el Ayuntamiento de Lorca ha respaldado, con el objetivo de que esta iniciativa tenga un alcance divulgador más amplio, la elaboración de un documental y una exposición fotográfica que reflejan los aspectos más destacados del proyecto. La exposición estará abierta al público del 24 al 30 de abril en el Palacio Huerto Ruano, coincidiendo con el Día de la Solidaridad Intergeneracional que se celebra el 29 de abril”.
Y ha añadido que además, durante estos días, se han organizado visitas especializadas a la exposición para que diferentes entidades como pueden ser instituciones de mayores, centros escolares, programas de acogida humanitaria, Convive Fundación Cepaim o el Programa CaixaProinfancia, entre otros, puedan conocer en profundidad esta experiencia, por lo que “desde el Ayuntamiento invitamos a todas las entidades sociales del municipio, como a los lorquinos en general a participar y aprender de este modelo de solidaridad y cooperación intergeneracional que ha sido todo un éxito”, ha concluido.
Cabe recordar que la Cátedra de Poncemar de Gerontología de la Universidad de Murcia en colaboración con el Ayuntamiento de Lorca, solicitaron en 2016 la adhesión de la ciudad al movimiento de ciudades amigables para las personas mayores promovido por la Organización Mundial de la Salud. Desde entonces, tanto Ayuntamiento como Fundación Poncemar han trabajado conjuntamente para promover el respeto y la inclusión de las personas mayores a través del trabajo intergeneracional.
