Alienta “a defender nuestros colores” y anima a los visitantes a hacerse partícipes de ellos alzando hasta lo más alto los pañuelos al paso de banderas, tronos, carrozas y carros, al ritmo de los sonidos de las cofradías
Pide que sean únicamente pétalos los que caigan desde lo más alto durante el transcurrir de los tronos por las calles, implorando con vehemencia que el cielo no llore al paso de nuestras imágenes por la carrera
Fulgencio Gil Jódar, alcalde: “Llega la Semana Santa, nuestra ‘Pasión diferente’. Es momento de engalanar balcones y fachadas con nuestros colores y de mostrar al mundo entero nuestra peculiar forma de vivir los últimos días de Nuestro Señor Jesucristo”
Martes, 15 de abril de 2025. El tradicional Bando de la Semana Santa de Lorca ocupa un lugar destacado en las tribunas de la carrera principal. El alcalde, Fulgencio Gil Jódar, quien lo rubrica, ‘tira’ de cierta ironía para recordar a los ciudadanos y visitantes el obligado cumplimiento de las normas en vigor.
“Avanzada la Cuaresma nos adentramos en la conmemoración de los últimos días de Nuestro Señor Jesucristo. Los sonidos de tambores y cornetas que se dejaban sentir lejanos se van acercando, mientras las naves, casas del paso y sedes religiosas, son un bullir de mayordomos que, prestos, disponen todo lo necesario para la celebración de la Semana Santa lorquina”, relata en el inicio del Bando.
Es, continúa, el resurgir de los sentidos, este año, bien entrada la primavera, tras un largo invierno que nos ha dejado los episodios de lluvias más extensos de las últimas décadas. A lo más alto imploro con vehemencia que alinee lo necesario para permitirnos que el cielo no llore al paso de nuestras imágenes por la carrera. “Y que sean únicamente pétalos los que caigan desde lo más alto durante el transcurrir de los tronos por las calles”.
Termina la cuenta atrás, añade. “Los relojes de los campanarios de Lorca anuncian que quedan pocas horas para la llegada de lo que en esta tierra se conoce como una ‘Pasión diferente’. En los talleres de bordado, directores artísticos y bordadoras, se afanan en dar las últimas puntadas en oro y sedas a los estrenos que sorprenderán a propios y extraños. Y en las casas de los lorquinos túnicas, cíngulos, solideos, crucetas, rosarios, guantes, mantillas, peinetas… abandonan arcones y armarios para ocupar un lugar principal a la espera de hacer procesión”.
Lorca se prepara para vivir sus días grandes “en los que las calles se transforman en un río de gentes que alzan hasta lo más alto sus colores. Blancos, azules, encarnados, morados, negros y archicofrades de Jesús Resucitado ‘tomarán’ la carrera para contar al mundo entero esta peculiar forma de vivir la Semana Santa, de celebrar el triunfo de Cristo sobre la muerte”, sigue contando.
Y en esto días, “a lorquinos y visitantes quiero recordarles el cumplimiento de las normas en vigor. Que se atienda la Ordenanza Municipal sobre Protección de la Convivencia Ciudadana y Prevención de Actuaciones Antisociales, con especial interés en el decurso de Recogidas de Banderas y Desfiles Bíblico Pasionales”.
Pide “cortesía, alabanza y corrección en los gritos y vivas a nuestras imágenes, cofradías y colores, olvidándonos de cualquier afrenta malsonante y ofensiva”. Y hace un llamamiento a la pasión, fervor, entusiasmo y delirio, “sin dejar de lado la práctica del arte del ingenio, sarcasmo y picardía –históricamente presentes-, pero sin necesidad de acudir a improperios, ofensas o mofas”.
Reclama a todos defender los colores y a animar a los visitantes a hacerse partícipes de ellos. “Alcemos hasta lo más alto los pañuelos al paso de banderas, tronos, carrozas, carros… y al ritmo de los sonidos de cada una de las cofradías”. Pero solicita que lo hagamos “sin sonidos de bocinas y otros utensilios que puedan entorpecer percibir los sonidos propios de la Semana Santa lorquina”.
En el Bando también pide que lancemos una lluvia de pétalos al paso de las imágenes que se convierta en alfombra sobre la arena de la carrera. “Y llenemos nuestras bolsas vacías de merienda con vainas, envolturas y latas que no deben, de ningún modo, dejarse caer en ningún otro lado”. Igualmente, solicita que “llevemos nuestra cortesía hasta el final de los Desfiles Bíblico Pasionales, evitando abandonar las tribunas y no ocasionar desasosiego a caballería y personajes con petardos y bengalas, que pueden poner en riesgo el normal desarrollo del cortejo”.
En el texto también hace un llamamiento para que se revise el estado de cornisas y balcones y otros elementos arquitectónicos de las fachadas susceptibles de caer a la vía pública. “Los propietarios están obligados a realizar tareas de saneado y reparación lo antes posible. Como también es de obligado cumplimiento mantener los solares limpios y puertas y ventanas cerradas, incluso tapiadas, de viviendas en ruina, para evitar incursiones”.
Y termina: “Llega la Semana Santa, nuestra ‘Pasión diferente’. Es momento de engalanar balcones y fachadas con nuestros colores y de mostrar al mundo entero nuestra peculiar forma de vivir los últimos días de Nuestro Señor Jesucristo. Hagámoslo con pasión, con devoción, con entusiasmo… Demostremos a todos que la nuestra sigue siendo la mejor Semana Santa del mundo”.