Patronal y sindicatos firmaron ayer el convenio colectivo gracias al cual se asegura la capacidad adquisitiva de los trabajadores y se asientan los objetivos en responsabilidad social corporativa
Calificado por el alcalde de Lorca, Francisco Jódar, como “un día para felicitarnos todos”, patronal y sindicatos con representación en el Comité de Empresa sellaron ayer el acuerdo laboral por el cual se regulan las mejoras socioeconómicas de la plantilla de saneamiento urbano de Limusa. La negociación, tal y como definía a continuación el alcalde, ha sido “ejemplar en tiempo y forma, con las tensiones lógicas del diálogo social”.
Con esta firma, añadía el alcalde y presidente de la empresa municipal, “se deja constancia de la capacidad de sacrificio de unos y otros con el objetivo de prestar el mayor servicio posible a la ciudadanía pero, a la vez, mejorar la calidad de vida de quienes han de prestarlo”. Se refería especialmente Jódar al gran avance dado por ambas partes sindicadas en minimizar los efectos del turno atípico, que obligaba a una fracción de la plantilla al trabajo en los habituales días de descanso de la mayoría.
De hecho, todos los firmantes coincidieron en señalar este acuerdo “que difumina las diferencias entre trabajadores” era una promesa de Jódar si llegaba a la Alcaldía del Ayuntamiento de Lorca, y un requisito constante en las negociaciones por parte de los trabajadores.
Además, la ciudadanía también notará directamente esta mejora social para los trabajadores ya que una vez asegurados los servicios mínimos de recogida domiciliaria de basura y limpieza viaria, los efectivos aumentan en los días laborables.
Económicamente, el convenio colectivo que rige las condiciones laborales de los trabajadores en los servicios de recogida de residuos y de limpieza viaria, además de a su estructura común, supondrá un incremento gradual de los conceptos salariales por encima del IPC nacional, actualizado anualmente y con efectos a todo el año.
Y por la parte social, se mantienen todos los beneficios anteriores (ayuda por dependientes minusválidos, a prótesis dentales y gafas, a matrícula de estudios superiores de los hijos y sus gastos derivados, a adquisición de material escolar, etc.) y se mejora en la reducción del turno atípico, quedando un retén para domingos y festivos que asegure la prestación de los servicios mínimos a la ciudadanía.
En este apartado, es novedad la incorporación en el articulado de una herramienta generadora de empleo, consistente en la sustitución de aquel trabajador que de forma voluntaria quiera acceder parcialmente a su jubilación a partir de los 60 años. Se generaría un nuevo puesto de trabajo, mientras el trabajador en jubilación parcial mejora su calidad de vida al reducir su jornada en un 85%.
Por todo ello, y por la celeridad en la que se han alcanzado posturas convergentes, el alcalde, Francisco Jódar, felicitó a todos los componentes de la mesa de negociación. Este convenio ha sido tratado en los últimos seis meses, cuando las anteriores firmas habían llegado a necesitar hasta año y medio de negociación.