A pesar del verano “las bibliotecas de Lorca mantienen el nivel de uso de cualquier otra época del año”, señala el Concejal de Educación
José Joaquín Peñarrubia, Concejal de Educación del Ayuntamiento de Lorca, ha ofrecido esta mañana los datos referentes a la utilización de las bibliotecas públicas municipales por los lorquinos durante el mes de julio.
Peñarrubia ha destacado la constante afluencia de usuarios durante estos días estivales. “A pesar de que estemos en verano, las bibliotecas de la ciudad mantienen el nivel de uso de cualquier otra época del año. Esto sucede tanto en las del casco Urbano, la Biblioteca de adultos Pilar Barnés, la Infantil y Juvenil del Centro Cultural y la del Príncipe de Asturias, como en las situadas en las pedanías”. Señaló además el edil que “los usuarios acuden a estos centros tanto para preparar diversos exámenes, bien de oposición, bien de la convocatoria de septiembre, como para consultar los fondos y, por supuesto, para llevarse en préstamo libros y películas”. En este sentido, durante el mes de julio se han producido casi seis mil préstamos, de los que tres mil cuatrocientos dos se realizaron en la Biblioteca Infantil y dos mil doscientos diecisiete en la Biblioteca Pilar Barnés.
Ante estos datos, ha señalado el Concejal de Educación su satisfacción, puesto que “queda demostrado que los lorquinos se interesan por la lectura y el cine. Estos datos reflejan el gran interés, tanto de niños como de adultos, por emplear su tiempo estival en actividades tan recomendables como estas”.
Durante el mes de julio se han recibido ciento cuarenta nuevas solicitudes de alta, por lo que el número de socios de las bibliotecas públicas municipales ha registrado un considerable aumento, “con lo que queda demostrado que durante el verano las bibliotecas de Lorca están más vivas que nunca”, indicó Peñarrubia.
El edil lorquino expuso también los datos de utilización de las bibliotecas de las pedanías de La Paca, Almendricos y Purias, que “reciben una media diaria de veinte usuarios, de los cuales la mayoría son niños y niñas. Además, estos pequeños usuarios retiran al día en préstamo una media de veintidós documentos, por lo que los magníficos datos de las bibliotecas del casco urbano son también extensibles a estos centros de las pedanías”.
Por último, quiso Peñarrubia “animar a todos los lorquinos a que sigan usando las bibliotecas municipales e indiquen a los responsables de las mismas qué títulos consideran que deben ser incorporados para su consulta y préstamo, así como cualquier tipo de mejora necesaria para que el uso de la red pública de bibliotecas siga in crescendo”.