El Alcalde acuerda con la Consejería de Educación el mantenimiento y reparación del gimnasio del instituto José Ibáñez Martín



El Concejal de Educación ha explicado que el trabajo desarrollado por parte del Primer Edil lorquino ha sido muy intenso, liderando la petición expresada por parte de la comunidad educativa tendente al mantenimiento de esta construcción.



13 de junio de 2014. El Concejal de Educación del Ayuntamiento de Lorca, Francisco Montiel, ha informado que las gestiones llevadas a cabo por parte del Acalde de la ciudad, Francisco Jódar, han permitido que la CARM, a través de la Consejería de Educación, financie la reparación del gimnasio del instituto José Ibáñez Martin. Montiel ha explicado que el trabajo desarrollado por parte del Primer Edil lorquino ha sido muy intenso, liderando la petición expresada por parte de la comunidad educativa tendente a mantenimiento de esta construcción. Hemos de agradecer la especial sensibilidad mostrada al respecto por parte de esta Consejería, que siempre ha estado abierta al consenso sobre este asunto.



Montiel Sánchez ha explicado que este gimnasio se emplaza dentro de un recinto educativo en el que se albergan dos centros de educación; los institutos de Enseñanza Secundaria José Ibáñez Martín y Francisco Ros Giner. Esta construcción se corresponde con un edificio de tipología aislada y se completa con dos construcciones destinadas a vestuarios, aseos y almacenes: una edificación anexa en su lateral derecho y una edificación secundario exento, situada en la parle posterior de la edificación anexa y muy próxima a la fachada lateral derecho del gimnasio. El conjunto de los tres inmuebles constituye una unidad cerrada físicamente.



El gimnasio es un edificio de planto rectangular, de unos 31 x 11 metros y de una sola planta con una altura de 5’60-7’40 metros, salvo en la zona de fachada principal donde se consideran dos plantas: en la planta baja (bajo el graderío) existen unas estancias (despacho, paso y aseo) y la caja de escalera que accede al mencionado graderío. La edificación anexa tiene una planto rectangular, de unos 8 x 9’50 metros, de una sola planta con una altura de unos 3’50 metros. La edificación secundaria exenta también tiene una planta rectangular, de unos 14 x 6 metros, de una sola planta con una altura de unos 3’50 metros.



De acuerdo con las indicaciones técnicas, constructivamente, el edificio del gimnasio es el más antiguo (entorno a 1962-1964). Está resuelto con muros de carga de fábrica de ladrillo. La cubierta es abovedada, en el sentido de la fachada de mayor longitud, apoyado perimetralmente en los zunchos de atado de los muros, atirantado con barros de acero anclados en los citados zunchos y recibida con mortero de cemento (los dos roscas superiores) y con mortero de yeso (la rosca inferior), rematada superiormente con una capa de compresión y pavimentada con loseta de rasilla.



Francisco Montiel ha manifestado, además, que las indicaciones realizadas por parte de los técnicos apuntan a que las reparaciones que se deben llevar a término en el mencionado inmueble contemplarían el sellado de las grietas en los muros de carga, reparación de la fisura producida en el encuentro del zuncho de coronación con los muros, refuerzo estructural de la rotura existente en un tramo de la bóveda, reparación de fisuras en los revestimientos, aplicación de un acabado interior en las fisuras. En las construcciones posteriores anexas al propio edificio del gimnasio también sería necesario llevar a término una batería de reparaciones.