Esta nueva fase de la sesión formativa titulada “CUIDAR: Diálogos con expertos” comenzará a las 9:30 y contará con especialistas en distintos ámbitos de actuación (comunicación, psicología, protección civil, herramientas digitales) relacionados con la gestión de desastres y situaciones de emergencia
12 de mayo de 2017. El Concejal de Emergencias y la Concejal de Gestión de Recuperación tras los terremotos del Ayuntamiento de Lorca, Juan Miguel Bayonas y Saturnina Martínez, respectivamente, han informado de que mañana 13 de mayo tendrá lugar en el Huerto Ruano, desde las 9:30 hasta las 14:00, la nueva fase formativa del proyecto “CUIDAR: diálogos con expertos” dedicado a promover la resiliencia y la participación de niños y jóvenes en la gestión de desastres. Se trata de un proyecto europeo, organizado y dirigido por el equipo de la Universitat Oberta de Catalunya, que se realiza en cinco países diferentes; Lorca ha sido uno de los lugares escogidos para participar en la iniciativa.
“A esta nueva sesión asistirán como invitados cuatro expertos en distintos ámbitos de actuación: intervención psicológica en emergencias, comunicación de emergencias, herramientas digitales para la gestión de desastres y protección civil. También acudirán responsables políticos municipales que pueden ayudar desde su competencia y experiencia personal mediante interesantes aportaciones. El objetivo es desarrollar un diálogo relajado y productivo con los jóvenes, conocer de primera mano sus inquietudes y poder trabajar desde el conocimiento de cada uno en la producción de pequeñas ideas o soluciones que ayuden a recoger mejor la voz, percepciones y necesidades de estos jóvenes”, ha explicado el Edil de Emergencias.
“A través de distintas sesiones, los miembros del proyecto CUIDAR han podido explorar las nociones y el conocimiento sobre riesgos y desastres de los jóvenes participantes y esto les ha permitido ayudarles a priorizar los riesgos que más les preocupan, sobre todo el riesgo sísmico, e intercambiar con ellos propuestas, planteamientos, ideas y sugerencias para la mejora de la autoprotección, la comunicación y la gestión emocional en situaciones de desastre. Esta última parte es de vital importancia puesto que el principal objetivo del proyecto es recoger la voz de los jóvenes e implicarlos en el diseño de propuestas y mejoras que puedan expresar óptimamente sus necesidades, ideas y percepciones”.
“La sesión tendrá una primera parte de breves presentaciones mutuas con una duración de 5 minutos aproximadamente. Luego se trabajará en pequeños grupos, donde jóvenes y expertos compartirán preguntas e ideas, y desarrollarán pequeñas soluciones a las necesidades planteadas por los jóvenes. Cada experto trabajará en el ámbito que conoce, orientando con su conocimiento a los jóvenes en su exploración de mejoras y propuestas en los distintos ámbitos identificados. Además, en cada grupo habrá un miembro del proyecto CUIDAR, facilitando la interacción, así que no hay que preocuparse de nada porque en todo momento se buscará la manera de que el diálogo sea fluido ”, ha detallado Saturnina Martínez.
Finalmente, se compartirán las distintas soluciones trabajadas en grupo, tratando de acordar aquellas que se consideran más necesarias, realizables y prioritarias. Si hay tiempo, se tratará de traducir estas ideas en un plan de implementación que permita desarrollar efectivamente alguna de estas acciones. La sesión concluirá con una valoración de la sesión y de los aprendizajes mutuos adquiridos durante el intercambio de conocimientos.
La Edil de Gestión de Recuperación tras los terremotos ha señalado que “el Consejo de la Juventud, en representación de las diferentes asociaciones juveniles, trasladó la necesidad de conocer de primera mano los pasos a seguir para estar seguros, autoprotegerse mejor y, especialmente, aprender a gestionar el miedo y la reacción emocional que se deriva de una situación de emergencia. También nos comentaron la necesidad de pensar espacios de cuidado y aprendizaje mutuo después de vivir un desastre de tal magnitud como el que se produjo en Lorca aquel fatídico 11 de mayo”.